Se acerca el verano y los deseos de muchas mujeres por querer bajar de peso aumentan. Pero ten cuidado, ya que no existen los milagros y ninguna de las pastillas para adelgazar que ofrece el comercio te harán lucir un cuerpo perfecto en poco tiempo.
La clave es consultar siempre a un especialista y cambiar los hábitos alimenticios, ya que automedicarse o adquirir medicamentos que dicen ser naturales, podrían de igual modo resultar nocivos para tu salud.
La nutricionista de la Clínica Dávila Gloria Rebolledo, acota que una terapia medicamentosa para tratar la obesidad puede entregar buenos resultados, sólo si es administrada y supervisada por un médico. A pesar de esto, la profesional aclara que “no es la solución definitiva, ya que no se puede permanecer tomando medicamentos para controlar el peso (…) lo principal es cambiar los hábitos alimentarios e incorporar actividad física para que los resultados permanezcan en el tiempo”.
La promesa de una pastilla para adelgazar rápido y sin modificar la dieta de costumbre es falsa. Las opciones son variadas: diuréticas (que te hacen orinar con mayor frecuencia), inhibidoras del apetito o quemadoras de grasa. De todos modos, ingerir cualquier pastilla para adelgazar sin receta médica puede ser peligroso. “Aunque sean de líneas naturales, nunca es recomendable auto medicarse. Siempre deben ser supervisadas por un médico”, aclara la especialista.
Tipos de pastillas y sus efectos
Ya te adelantábamos las distintas opciones que existen a la hora de adquirir una pastilla para adelgazar. En palabras de la experta, aquellas pertenecientes a las líneas naturales pueden dividirse en dos grupos. Las primeras corresponden a aquellas inhibidoras de la absorción de hidratos de carbono provenientes de extractos del poroto y la papa, que en sus palabras, “pueden producir meteorismo (flatulencia), trastornos de absorción y, en caso que se trate de pacientes diabéticos no controlados, alteraciones en las glicemias”.
Las segundas de esta línea natural, son las quemadoras de grasa principio activo Teavigo (concentrado de té verde) y L-Carnitina (aminoácido conjugado). “El fin de ambos es movilizar tejido graso y quemarlo, sin embargo, sus resultados no son perceptibles si no se acompañan de ejercicio y régimen”, insiste la nutricionista. Asimismo, comenta que “ningún medicamento de estos puede ser consumido por embarazadas o nodrizas y no son recomendables en ninguna persona sin supervisión médica”.
En la línea farmacológica, existen aquellas pastillas inhibidoras de la absorción de grasa, que provocan deposiciones con contenido de grasa conocida como esteatorrea. Otras pastillas para adelgazar funcionan como estabilizadores del ánimo, manejando la ansiedad. Aunque debes tener cuidado, puesto que sólo se venden con receta médica. Recuerda además, que las pastillas para adelgazar no son efectivas sin un cambio de hábito en la alimentación.
De llegar a bajar de peso al consumir alguno de estos medicamentos sin modificar la dieta, lo más seguro es que se recuperen los kilos en un corto tiempo, incluso superando el estado inicial del tratamiento. “Estas fluctuaciones de peso son muy dañinas para el organismo porque provocan una serie de alteraciones como depleción del compartimento muscular, trastornos en el ánimo como frustración, depresión y baja autoestima, además de generar un circulo vicioso que provoca ansiedad y favorece la resistencia a la insulina”, precisa la especialista.