sábado 7 de diciembre de 2024
12.9 C
Buenos Aires

SALUD

Ser rechazado por otra persona afecta anímica y también físicamente

Ser dejado de lado por otra persona genera mucho dolor emocional, pero parece que el corazón también se resiente ante la indiferencia de los otros. El rechazo social hace que la frecuencia cardíaca disminuya por unos instantes.

A dichas conclusiones llegó una nueva investigación realizada por las Universidades de Amsterdan y Leiden (Holanda), y publicada en la revista Psychological Science.

El presente estudio podría influir en el conocimiento en torno a las enfermedades cardíacas, que constituyen una de las principales causas de muerte a nivel mundial. Hay distintas patologías que pueden afectar al corazón, pero la más frecuente es la enfermedad coronaria. Este mal sucede cuando se estrechan o bloquean los vasos sanguíneos que irrigan al corazón, impidiendo que la sangre se distribuya adecuadamente por este músculo. En los casos más graves, este problema puede generar un ataque al corazón, que ocurre cuando la sangre ya no llega a una parte de este órgano porque una arteria se bloqueó.

DOLOR DEL CORAZÓN
Investigaciones previas encontraron que el cerebro procesa el dolor físico y social en áreas en común. Para analizar el efecto de un rechazo emocional en el corazón, los autores pidieron a los voluntarios que enviaran una foto de sí mismos. Les dijeron que iban a estudiar las primeras impresiones, por lo cual enviarían a otros participantes sus retratos para que ellos respondieron si les gustaban o no.

En realidad, un par de semanas después los voluntarios fotografiados se acercaron al laboratorio y los científicos les hicieron un electrocardiograma en todo el tiempo que duró el experimento.

Cada participante vio fotos de otras personas y debía adivinar si ese otro individuo había dicho que le gustaba o no. A continuación, los autores les dijeron al azar que algunos de los fotografiados habían dicho que ellos eran agradables pero que otros habían comentado que no eran atractivos.

La frecuencia cardíaca de los participantes bajó en dos momentos distintos: cuando esperaban para saber si le habían gustado al otro o no, y cuando los investigadores les decían que el fotografiado había dicho que no era atractivo. En este último caso la frecuencia cardíaca bajó aún más y tardó más tiempo en restaurarse.

El rechazo social inesperado puede literalmente hacer sentir que el corazón se rompe, concluyeron los autores.

 

 

Te puede interesar