Una española de 25 años denunció que recibió un tratamiento excesivo en un hospital de la localidad de Albacete, donde había ingresado por un cuadro de fiebre, falta de aire y mal estado general, tras el cual perdió sus manos y piernas.
La mujer, denunció que ingresó al Hospital General de Albacete con un cuadro febril a raíz de un shock séptico por una infección que sufrió tras dar a luz a su cuarto hijo. El nacimiento se produjo el 12 de noviembre de 2007, y días más tarde fue admitida en el centro médico, donde le administraron altas dosis de drogas vasoconstrictoras durante nueve días.
A raíz del duro tratamiento, la mujer perdió sus manos y piernas, según denunció a la oficina de Defensa del Paciente, donde se estableció que le amputaron sus miembros “como consecuencia de la administración masiva de estos fármacos” porque “presentó isquemia y necrosis profunda en miembros inferiores y superiores”, según informó el sitio español 20 Minutos.
La investigación actual apunta a comprobar si se trató de un caso de mala praxis médica, basándose en la historia clínica completa que presentó la mujer. Ahora, la víctima se encuentra en el Hospital de La Paz, en Madrid, donde se sometió a un tratamiento quirúrgico pionero para reducir las secuelas.