viernes 19 de abril de 2024
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SALUD

Poliomielitis: promueven la vacunación infantil por el riesgo de una enfermedad erradicada

“Si las coberturas de vacunación no superan el 95%, la polio puede volver”, alertó la OPS. El Ministerio de Salud de la Nación iniciará una campaña desde octubre para aplicar dosis en niños de 1 a 4 años
En 1942 y en 1956 Argentina transitó dos brotes de poliomelitis que afectaron a unas 6.500 personas y generó preocupación en el sistema de salud nacional, además de causar muertes y discapacidades que marcaron una época. En los años posteriores, el mundo contabilizó 350.000 casos en 125 países y la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó en 1988 el programa de Erradicación Mundial de la Poliomielitis.

Pasaron 30 años de esta intensa campaña, impulsada también por distintas organizaciones civiles, para que el mundo eliminase la enfermedad en un 99%. Sin embargo, una de la consecuencias de la pandemia por COVID-19 fue la baja en la vacunación de la población respecto a otras enfermedades y la aparición de estas en forma aislada en algunos países del mundo.

El mes pasado, Mozambique identificó su primer caso de poliomielitis salvaje en 30 años, el caso fue confirmado luego de la secuenciación genética de una cepa similar de la enfermedad infantil en Malawi a principios de este año. El doctor Matshidiso Moeti, director regional para África de la Organización Mundial de la Salud, dijo que la detección del nuevo caso era “muy preocupante” y que demostraba “cuán peligroso es este virus y cuán rápido puede propagarse”.
África fue declarada libre de poliomielitis salvaje autóctona en 2020, y el último caso no afectará esa certificación, ya que parece ser una cepa importada, dijo la OMS. Con la erradicación de la poliomielitis como uno de los grandes éxitos de la salud mundial, el poliovirus salvaje ahora es endémico solo en Afganistán y Pakistán.

Un mes antes, Israel confirmó su primer caso de polio desde 1989, al ser detectada en un niño de 4 años, residente de Jerusalén, que no estaba vacunado. “Parece haber sido infectado con una cepa que ha sufrido mutación y podría causar enfermedad en quienes no están vacunados”, afirmaron, por lo cual desde el Ministerio de Salud local.

“Lo primero que hay que aclarar es que la poliomielitis no es una enfermedad erradicada. La única enfermedad erradicada es la viruela en los años 80. La poliomielitis es una enfermedad eliminada de las Américas por declaración de la OMS en 1994. Esto quiere decir que no hay casos oficiales, pero persiste el riesgo de que se generen en la actualidad por la importación de casos de poliomielitis salvaje en Afganistán, Pakistán y el caso de Israel”, explicó a Infobae la doctora Silvia González Ayala, profesora y especialista en enfermedades infecciosas de la Universidad Nacional de La Plata y la Sociedad Argentina de Infectología.

“Este último fue un caso de poliomielitis derivado de la vacuna Sabin. La poliomielitis se divide desde hace varias décadas en poliomielitis por virus salvaje, por virus vacunales Sabin y por virus derivados vacunales Sabin que producen epidemias comunitarias como las que se observan en África. Nosotros tenemos un riesgo moderado alto de introducción de la poliomielitis por qué las coberturas de vacunación son bajas para una enfermedad eliminada como poliomielitis, el sarampión y la rubéola. Se necesitan coberturas iguales o mayores a 95% por ciento, por eso el riesgo real y estamos hablando de una enfermedad gravísima de la que acuerdan los bisabuelos más qué nosotros”, completó la experta.
Campaña nacional

A partir del 1° de octubre y hasta el 13 de noviembre el Ministerio de Salud de la Nación llevará adelante la campaña nacional de vacunación contra sarampión, rubéola, paperas y poliomielitis en niñas y niños de uno a cuatro años para mantener la eliminación lograda en el país de sarampión, rubéola, síndrome de rubéola congénita, poliomielitis y controlar la parotiditis.

La finalidad de esta campaña es alcanzar una cobertura del 95% o más de la población objetivo con la aplicación de dosis adicionales al esquema nacional de la vacuna triple viral (SRP) y de la vacuna inactivada antipoliomielítica (IPV) en todo el país.

Es por eso que los servicios de salud públicos y privados deberán garantizar la vacunación contra sarampión, rubéola, paperas y poliomielitis en forma gratuita y obligatoria a toda la población objetivo, independientemente del antecedente de haber recibido estas vacunas con anterioridad o haber padecido las enfermedades. Para cumplir con este propósito, el Ministerio de Salud de la Nación proveerá de vacunas, material descartable y carnets.

“Este año se cumplen 20 años de que los países de las Américas decidimos en conjunto trabajar para evitar la reintroducción de la polio y el sarampión y eso se hace a través de las vacunas. Es lo que estamos haciendo hoy, con un calendario que tiene 20 vacunas, por eso, en la Semana de la Vacunación de las Américas son 20 años, 20 vacunas”, explicó el subsecretario de Estrategias Sanitarias, Juan Manuel Castelli, en el marco de la Semana de Vacunación de las Américas, que se celebró a fines de abril.

Siglos atrás, la polio era llamada la “debilidad de las extremidades inferiores”. En 1840 había sido descripta en Alemania por Heiden y cincuenta años después por Medin, en Suecia. Luego de varias epidemias en distintos puntos del globo, había empezado a propagarse, en forma preocupante, a principios del 1900. Tal como la define la Organización Mundial de la Salud, es una enfermedad muy contagiosa, transmitida por un virus que afecta principalmente a niños. El contagio se realiza de persona a persona; el virus puede estar presente en la materia fecal, en el agua o en alimentos. Luego de alojarse en el intestino, ataca al sistema nervioso, pudiendo causar la muerte, parálisis o dejar otro tipo de secuelas motrices.
A finales de febrero, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) pidió a los estados que componen el organismo que impulsen la vacunación contra esta enfermedad que fue declarada como erradicada en las Américas desde 1994.

Según explicaron, la poliomielitis se convirtió en una “amenaza real” por la caída en las coberturas de vacunación como consecuencia de la pandemia de COVID-19. “No podemos retroceder. Evitar casos de polio depende de tener una población infantil altamente vacunada y una fuerte vigilancia de la enfermedad”, dijo Andrés de Francisco, director de Familia y Promoción de la Salud de la OPS, al señalar que la tasa de vacunación en 2020 fue del 82%, la más baja desde 1994. “Si las coberturas de vacunación no son superiores al 95%, la polio puede volver”, alertó.

En ese tono, aseguró que la pandemia provocó que “las tasas de vacunación siguieran disminuyendo”, por lo que citó el ejemplo de Malaui (África Oriental), donde se declaró un brote de poliovirus salvaje de tipo 1. El último caso se había registrado en 1992, siendo que en 2020 África fue declarada libre de polio. “El reciente caso de poliovirus salvaje en África es un recordatorio de que cuando el virus sigue circulando, los niños de todo el mundo están en riesgo”, advirtió el funcionario de la OPS al recordar que en Pakistán y Afganistán esta patología aún es endémica.

Polio y otras enfermedades

La campaña vacunatoria en Argentina se hace en un contexto en el que es necesario desarrollar acciones para sostener la eliminación de enfermedades como el sarampión.

Cabe recordar que el último brote de esta enfermedad registrado en el país fue el más importante tras lograr la eliminación, se extendió por siete meses, desde agosto de 2019 a marzo 2020, período en el causó 179 casos y una muerte. Además, el sarampión puede causar complicaciones, principalmente en niños menores de cinco años o malnutridos, tales como neumonía, convulsiones, meningoencefalitis, ceguera, retraso mental grave y trastornos degenerativos tardíos del sistema nervioso central.
En cuanto a la rubéola y el síndrome de rubéola congénita en Argentina si bien no se reportan casos autóctonos desde el año 2009, cuando una persona embarazada susceptible expuesta al virus de la rubéola padece la enfermedad durante el primer trimestre del embarazo, se produce infección fetal y síndrome de rubéola congénita en el 90 por ciento de los casos.

El Síndrome de Rubéola Congénita produce muertes fetales y neonatales y graves malformaciones en el recién nacido, causando sordera, ceguera y cardiopatías congénitas estructurales y no estructurales, así como graves trastornos de aparición tardía como diabetes o discapacidad intelectual entre otros. Por otra parte, en los últimos años se han registrado brotes de paperas (o parotiditis) en Argentina. Se trata de una enfermedad inmunoprevenible que afecta tanto a niños como adultos, sin tratamiento específico, que provoca gran ausentismo escolar y laboral y puede causar en sus formas más graves meningitis y orquiepididimitis, pudiendo en este último caso conducir a la esterilidad permanente.

Finalmente, la Estrategia para la Fase Final de la Erradicación de la Poliomielitis 2019-2023 refleja la urgencia de erradicar la poliomielitis al haber sido declarada una emergencia de salud pública de importancia internacional en 2014.

Además, la existencia de poliomielitis salvaje en distintos países del mundo hace que todos estén en riesgo de reintroducción. Es una enfermedad altamente contagiosa ocasionada por el virus de la poliomielitis y puede causar parálisis permanente. A nivel nacional, es necesario mencionar que las coberturas del Calendario Nacional de Vacunación registran un descenso sostenido desde el año 2017, hecho que se vio agravado a partir de la pandemia de COVID-19 con caídas promedio entre 10 y 15 puntos respecto de años previos por lo cual esta campaña es fundamental.

Mantener protegidos a niños y niñas a través de la vacunación con una dosis adicional de las vacunas triple viral y antipoliomielítica es una estrategia que ha demostrado ser efectiva y segura y refuerza la importancia de sostener la vacunación como una política sanitaria prioritaria y con alto impacto en la salud de la población.

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